Callos con Garbanzos

A los enfermos del corazón nos prohíben la sal y el colesterol. Los callos, para los que les gusta,  son un plato delicioso, pero preparados de la forma tradicional tienen exceso de colesterol y sal.

Contra, lo que a primera vista se pueda pensar, los callos, el morro, las manitas de cerdo, no contienen colesterol sino básicamente, gelatina.

Podéis ver sus propiedades aquí

Los callos tienen 95mg/100g de colesterol y las manitas de cerdo 6mg/100g, mientras que la sardina, recomendada por cardiólogos tiene 80mg/100g por lo que nos los podemos permitir de vez en cuando.

Por supuesto esta receta , aunque laboriosa, no tiene ni sal ni colesterol y es una delicia para los amantes de los callos.

Ingredientes

 Callos de Ternera Pimentón Dulce
 Manitas de Cerdo Cominos
 Garbanzos Clavos
 Tomate Curry
 Cebolla Laurel
 Apio Mostaza
 Brandy Pimienta Negra
 Cayena Laurel

Elaboración:

  1.  Poner los garbanzos a remojo en agua caliente durante al menos 12 horas.
  2.  Limpiar lo mejor posible los callos, incluso cepillándolos, ponerlos en la olla exprés con un par de hojas de laurel y hervir durante 1 hora.
  3.  Tirar el agua de cocción, cortar los callos en trozos pequeños y reservar.
  4.  Lavar las manitas de cerdo y ponerlas en agua fría durante un par de horas.
  5.  Rehogar en la olla con un poco de aceite todas las verduras troceadas.
  6. Añadir las especias salvo el pimentón.
  7. Añadir los callos troceados
  8. Añadir brandy al gusto y dejarlo evaporar un poco.
  9. Añadir lo garbanzos.
  10. Apartar un momento del fuego y añadir el pimentón.
  11. Rehogar un poco mas, poner las mantas en el guiso y cubrir con agua.
  12. Asegurarse de que hay suficiente líquido para que todo este cubierto durante la cocción.
  13. Cerrar la olla y cocinar durante hora y cuarto a hora y media.
  14. Dejar enfriar, abrir la olla y sacar las manitas de cerdo.
  15. Deshuesar las manitas, trocearlas e incorporarlas al guiso.

 

     

    Notas:

    •  Este plato esta mejor comiéndolo el día después de hecho.
    • Si os sobra podéis triturarlo todo y hacer una pasta que se guarda en la nevera, si luego la calentáis, es una mezcla perfecta para untar o mojar pan.
    •  Puede que os apetezca añadir un poco de vinagre.
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